En Colombia, el desplazamiento
forzado causado por bandas paramilitares, continua siendo una constante en el
conflicto armado. Para el año 2010 se registraron 20.916 de desplazados, y para
el 2001, entre el 1 de enero y el 31 de noviembre del 2011, la cifra ascendió a
23.763. Sumando un total de 44.679 en los dos periodos reseñados.
De acuerdo a la Defensoría del Pueblo
en los departamentos que presentaron mayores víctimas de este fenómeno son:
Antioquia: 13.671
Córdoba: 8.844
Nariño: 5.036
Valle del Cauca: 4.704
Chocó: 2.221
Bolívar: 2.153
Magdalena: 1.248
Cauca: 1.226
Santander: 849
Meta: 803
Norte de Santander: 736
El Sistema de Alertas Tempranas de la
Defensoría del Pueblo, ha monitoreado a las nuevas bandas paramilitares y
afirma que estas “buscan mantener, a través de sus acciones de violencia, el
control de los negocios del narcotráfico, la exacción de rentas, la extorsión,
el préstamo por usura o paga diario, el lavado de activos y el control social”.
Estas bandas, mantienen un control territorial sobre diversos departamentos, se
tiene información que en los departamentos de
Antioquia, Chocó, Córdoba y Sucre, hay una constante confrontación entre
las bandas Los Paisas contra los “Los Urabeños”. La “Oficina de Envigado”,
tiene su “base de operaciones” en Medellín y su área metropolitana, articulándose
con otras bandas Paramilitares como Los Paisas y grupos delincuenciales de la ciudad ( pandillas
y crimen organizado).
En el departamento de Nariño, el
Bloque Libertadores del Sur, adscrito al Bloque Central Bolívar no se
desmovilizó en su totalidad, creándose las Autodefensas Nueva Generación, y según
información de la defensoría del pueblo las Autodefensas Campesinas de Nariño, no
de desmovilizaron totalmente, sino que se fusionaron con Los Rastrojos.
Las Águilas Negras surgieron en Norte
de Santander, al desmovilizarse el Bloque Catatumbo. Posteriormente, se conocen
con ese nombre en otras zonas del país como el Magdalena Medio, zonas de la
costa Caribe y otras ciudades, entre esas Bogota .
Como se observa en las anteriores
publicaciones, se podría crear un mapa de las zonas influenciadas por las
nuevas bandas paramilitares en Colombia, el gobierno no puede negar la
existencia de estos grupos y la gran influencia que tienen en diversas zonas
del país, colocando en peligro a la población civil y a los defensores de
Derechos Humanos.
Movimiento Dignidad hace un llamado
al gobierno nacional, departamental y municipal, para que se tomen las medidas
necesarias, acogiendo las recomendaciones de la defensoría del pueblo.
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